Nuevo Índice para medir lo 'verde'
Servirá de guía para inversiones en empresas pro medio ambiente
Yolanda Arenales
yolanda.arenales@laopinion.com
Muchas de las innovaciones "verdes" de las que el resto del país y el mundo acabarán beneficiándose se incubarán en California, esto como parte de una fuerza económica y creativa que se ha iniciado en el estado.
De hecho, la organización no lucrativa Next 10 fundada por el capitalista de riesgo Noel Perry y la consultora Collaborative Economics inauguran hoy miércoles el nuevo Índice de Innovación Verde de California, el cual analizará la correlación entre el medio ambiente y la economía.
La primera edición del índice recopila muchos de los logros conseguidos hasta ahora con respecto al consumo energético, así como a las emisiones contaminantes, mostrando también algunos de los retos más inminentes a los que se enfrenta el estado y el país en materia medioambiental.
También incluye una encuesta que Next 10 encomendó a la consultora Field Poll sobre las actitudes de los californianos frente al calentamiento global, en la que un 70% de ellos considera este aspecto "extremadamente o muy importante", y un 85% piensa que se puede conseguir una reducción de los gases invernadero y a la vez expandir la economía.
"Nuestra intención es agrupar una gran cantidad de datos relevantes que puedan ayudar tanto a los funcionarios a cargo de políticas públicas como al sector privado a tomar las decisiones más acertadas", dice Perry, indicando que habrá una edición anual del índice que sirva para comparar el progreso realizado en este sentido.
"Cada vez hay más capital de riesgo disponible para las innovaciones medioambientales, y California tiene talento y recursos para desarrollarlas, pero hace falta planificación para afrontar retos como cumplir con la AB32", dice Perry, refiriéndose a la Ley de California de Soluciones para el Calentamiento Global de 2006, la cual establece, entre otras cosas, que para 2020 las emisiones de gases invernadero no sobrepasen los niveles registrados en el estado en 1990.
También, la AB32 requiere que a partir de enero de 2008 existan regulaciones obligatorias para reportar cualquier emisión significativa que se esté produciendo, y que para 2009 se haya adoptado un plan sobre cómo se llevarán a cabo las reducciones para alcanzar los objetivos establecidos por esta ley.
"El reto es grande, pero somos muchos los que estamos dispuestos a apostar por él", sostiene Perry, quien utilizó sus propios fondos para financiar este índice a fin de desarrollarlo de forma neutral y sin presiones políticas o económicas.
Según el índice, en 2006 un 36% del capital de riesgo invertido en California fue a parar al sector de tecnologías energéticas, totalizando más de 880,000 millones de dólares.
Doug Henton, presidente de Collaborative Economics, señala que uno de los objetivos del índice es mostrar que el combatir el calentamiento global no va en contra del crecimiento económico.
"Por el contrario, se trata de un esfuerzo que creará nuevos negocios y empleos", afirma Henton, indicando que California ya va a la vanguardia en cuanto a consumo energético.
El economista cita como ejemplo el hecho de que la factura total de electricidad de California con relación a su Producto Interno Bruto (PIB) es más baja que la del resto del país, y que si se equiparara con la de Texas, se requerirían 25,000 millones de dólares anuales extras, que aquí pueden utilizarse para invertir y generar más riqueza.
Sin embargo, particularmente preocupante en California, según el índice, son las emisiones derivadas del transporte, las cuales actualmente contribuyen con un 41% del total de las emisiones de gases invernadero que genera California.
Según Manuel Pastor, profesor del Programa de Igualdad Regional y Medioambiente de la Universidad del Sur de California (USC), afrontar estos retos tendrá amplias repercusiones positivas para las minorías, no sólo porque estas suelen concentrarse más en las áreas con más contaminación como las que circundan a los puertos de Los Ángeles, sino porque serán las más beneficiadas con los nuevos empleos que se creen.