Las olas de frío sucesivas en Europa son al parecer consecuencia de un enfriamiento temporal en el marco del calentamiento climático, que podría durar de cinco a 10 años, señalan los expertos.
Para el profesor David King, quien fue asesor científico del gobierno británico de 2000 a 2007, el fenómeno se explica por la oscilación noratlántica --diferencia de presión entre el anticiclón de las Azores y la depresión de Islandia--, un fenómeno que los meteorólogos conocen bien.
"La frecuencia de esta oscilación varía, y es lo que la hace difícil de prever, pero la última vez que tuvimos este tipo de régimen de bajas presiones fue en los años 60", recordó este martes en la BBC.
"Entonces duró entre 5 y 10 años, con extremos, inviernos fríos y veranos calurosos, y si estamos en este tipo de ciclo mi consejo sería que nos preparásemos", agregó alertando de los "riesgos económicos" en caso de no hacerlo.
El gobierno británico fue duramente criticado por su falta de preparación, evidenciada por la insuficiencia de reservas de sal (para evitar la formación de placas de hielo) y máquinas quitanieves y la consiguiente parálisis de los transportes.
El ministro de Transportes, Philip Hammond, anunció el lunes que iban a estudiar si se necesitaban más inversiones a largo plazo.
La fase fría se inició hace tres años. "El Reino Unido tuvo dos inviernos, 2008/09 y 2009/10, con temperaturas inferiores a los promedios estacionales", confirmó a la AFP John Hammond, portavoz de la agencia meteorológica británica (Met Office).
Además, este mes se perfila ya como el diciembre más frío desde 1910, aunque es aún demasiado pronto para hablar del conjunto del invierno, que oficialmente comenzó este martes.
El meteorólogo recordó que a medio o largo plazo el Reino Unido debería conocer "inviernos más templados y húmedos" debido al calentamiento global provocado por las actividades humanas.
"No es un fenómeno global", subrayó por su parte Julia Slingo, principal científica de la Met Office, citada por el Times del martes. "Si se mira lo que ocurre en Groenlandia, se observa que hace un calor excepcional".
Pero confirmó que podría estar llegando una fase más fría, como la de los años 60.
"Hemos tenido desde hace 20 años una sucesión de inviernos relativamente templados y no se ha puesto a prueba nuestra resistencia a este tipo de acontecimientos", señaló. "Nuestra manera de vivir también ha cambiado en estos 20 años, lo mismo que nuestra vulnerabilidad".
El número de viajes se ha disparado, como ilustra el caos registrado en los aeropuertos y en el sistema ferroviario europeo, mal equipado para la nieve, el hielo y las gélidas temperaturas reinantes.
King teme que la prevención de los riesgos se vea afectada por los recortes presupuestarios decididos por el gobierno, y hace un llamamiento a Europa a invertir masivamente en ordenadores superpotentes "para mejorar nuestros modelos climáticos y prepararnos correctamente" a los desafíos que plantea el cambio climático.